Se refiere al estado de bienestar general del ser humano, es decir, tiene que ver con la salud física, mental y social de un individuo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud integral como un conjunto de factores biológicos, mentales, emocionales y espirituales que contribuyen a un estado de equilibrio en el individuo.

Visto desde este punto de vista, estar sano va más allá de no tener enfermedad alguna y tiene que ver con una situación de desarrollo humano que cada persona debe cuidar y conservar. Implica entonces alimentarse balanceadamente, hacer ejercicios regularmente y que todos los órganos del cuerpo tengan un óptimo funcionamiento.

Salud Física

Consiste en tener el cuerpo en buen estado y que todos los órganos funcionen óptimamente. Por lo general las personas prestan mucha atención a este aspecto y suele ser del que más se ocupan. Parte de cuidar el cuerpo tiene que ver con ejercitarse regularmente y llevar una alimentación lo más saludable posible.

Salud Mental

Comprende el bienestar psicológico, emocional y social de todo individuo. A pesar de ser tan importante como la salud física, muchas veces se le otorga menor atención al cuidado de lo que pensamos, sentimos y cómo nos relacionamos con quienes nos rodean.