Las Chinches son insectos pequeños, sin alas que se alimentan de la sangre de humanos, pájaros, roedores, murciélagos y mascotas. Pueden ser muy pequeñas y en su edad adulta alcanza un tamaño de ¼ de pulgada de largo. Tienen forma ovalada y plana y su color puede ser blanco o café oscuro.

Estos molestos insectos se esconden en las fisuras, grietas o huecos y por lo general salen de allí en las noches para buscar sangre para alimentarse. Hasta la fecha no se conoce enfermedad alguna que sea transmitida por este insecto pero la saliva que inyectan en la piel al alimentarse puede generar reacciones alérgicas, comezón e inflamación.

Origen de las chinches.

Las causas por las cuales han aparecido estos insectos responden principalmente al crecimiento de viajeros internacionales y a algunos cambios en cuanto a las prácticas de exterminio de insectos.

Estos insectos son muy comunes de encontrar en Asia, África, América Central, Sudamérica y Europa. El creciente tráfico de turistas y viajantes trae consigo el aumento de  infecciones de chinches y lo más curioso de todo es que en la mayoría de las veces las personas los traen consigo al regresar a sus países, bien sea en la ropa o equipaje.

Otra razón por la cual ha aumentado la presencia de este insecto es que se haya dejado de usar en su exterminio, a partir de la década de los 50, el pesticida DDT a causa de su prohibición  que se tradujo en su proliferación.

Chinches de cama

Si nos preguntamos cómo acabar con las chinches de cama, debemos comenzar por decir que los más comunes son de color café rojizo o caoba, con cuerpo ovalado y aplanado y de un tamaño similar al de una semilla de manzana. Cuando se alimenta su cuerpo se aprecia menos ovalado, más grande y de una tonalidad más intensa.

Cabe  mencionar que la presencia de este insecto en el hogar, hoteles o pensiones no guarda relación alguna con falta de higiene; se trata de un parásito que toma como huésped principal a los humanos y su mordedura genera inflamación, ronchas y escozor. Generalmente muerde en espalda, piernas y brazos.

Las chinches generalmente ingresan a una vivienda a través de tuberías o cables y en algunos casos en muebles de segunda mano especialmente si se trata de camas, colchones y objetos de madera.